Los nómadas digitales, también llamados e-nomads, son aquellos profesionales que trabajan valiéndose de las nuevas tecnologías y que además, no tienen un entorno de trabajo fijo o estable, sino que desempeñan su actividad de forma remota desde diversos puntos como sus casas, espacios de coworking o diferentes ubicaciones a lo largo y ancho del planeta.
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Quizá por su constante movilidad, es más complicado que los nómadas digitales puedan ejercer un control exhaustivo de sus gastos e ingresos, prever sus movimientos financieros con antelación o tener mayor margen de ahorro, una situación que se agrava cuando los costes de viajar y moverse constituyen una gran proporción de sus gastos o sus ingresos no son regulares. Por ello, a continuación proponemos una serie de apuntes para ahorrar más y organizarte mejor si eres e-nomad.
Claves para el ahorro y la organización financiera de los e-nomads
- Haz la media de tus ingresos: Para no llevarte sustos, analiza lo que ha ganado en los últimos doce meses y usa los ingresos mensuales más bajos como referencia para su presupuesto. De esta manera, en los períodos de ingresos mensuales más altos, podrás ajustar los gastos e incrementar el ahorro.
- Planifica la media de gastos: Observa qué gastos son fijos y cuáles son variables. Es posible que entre los primeros se encuentre la factura del móvil, la cuota de autónomos, el seguro o la conexión a Internet. Para los variables, haz una media e intenta ceñirte a ella en la medida de lo posible, reservando un fondo de ahorro de emergencia para posibles imprevistos o viajes largos.
- Revisa tus gastos no básicos: Aquí entra en juego el ocio y los caprichos, ir a cenar fuera, comprarse ropa o el entretenimiento. Pon un mínimo y un máximo que puedes gastarte al mes o destina una cuenta aparte para tus vacaciones, ahorro a largo plazo o gastos de este corte.
- Determina cuánto puedes reservar para tu jubilación cada mes: En este post, te contamos detalladamente cómo realizar un plan de ahorro planificado para la misma, algo especialmente importante si perteneces a la generación millennial. Algunas de las pautas básicas son fijarte metas -sobre todo a partir de los treinta años- y estudiar las distintas opciones que te ofrezca tu banco y otras entidades, así como valorar los pros y contras de los planes de pensiones. a
- Revisa los gastos de tu hogar: Aunque te muevas, si eres el dueño de una casa o estás alquilando una, tendrás que pensar dónde encajan esos gastos en su presupuesto mensual.
- Analiza tu tarjeta de crédito: Como nómada digital, la forma más fácil de pagar cosas puede ser usar una tarjeta de crédito que no cobre ninguna tarifa de transacción extranjera, y luego pagar el saldo completo cada mes. Si crees que precisarás habitualmente dinero en efectivo o prefieres usar una tarjeta de débito para ciertas compras, puede reconsiderar tu ubicación bancaria.
- Ten en cuenta las tarifas de conversión de moneda: A la hora de cobrar trabajos en otras zonas, ten en cuenta lo que pagarás por la conversión y cuál es la tasa de cambio de tu dinero.
Fuente | The Balance