Si les hablo del mercado de la “identificación automática y captura de datos” seguramente pensarán que estoy versando sobre alguna tecnología extraterrestre -casi tanto como la undécima victoria de Rafa Nadal en Roland Garros- o de algo que resulta ajeno a nuestras vidas cotidianas. Si cambio ese heterogéneo y complejo término por códigos de barras, tarjetas de banda magnética, códigos QR, productos de radiofrecuencia (RFID), sistemas biométricos o sistemas de reconocimiento de caracteres (OCR), quizás la conversación cambie sustancialmente.
Y es que, los productos y servicios de identificación automática y captura de datos están en todos lados, allá donde alcance la vista y mucho más. No en vano, estamos hablando de una de las industrias más lucrativas a escala global, con una facturación estimada para este curso de 40.310 millones de dólares y la previsión de que ésta crezca un 12,30% en tasa anual compuesta hasta 2023. Ese año, si se cumplen las previsiones, este mercado moverá nada menos que 72.000 millones de dólares.
¿Tienen (todavía) futuro los códigos QR?
Son datos de la firma de análisis MarketsandMarkets, cuyos expertos explican este boom a partir de la creciente industria del comercio electrónico, el creciente uso de teléfonos inteligentes para el escaneo de códigos QR y el reconocimiento de imágenes o la creciente adopción de soluciones de identificación automática y captura de datos por parte de las instituciones financieras.
Además, afirman los consultores, se espera que factores como el aumento de las regulaciones gubernamentales y las oportunidades de crecimiento de la gestión de la cadena de suministro y las industrias de la salud respalden el crecimiento del mercado de identificación automática y captura de datos en el próximo lustro.
Por segmentos de actividad, la industria seguirá siendo el principal cliente del mercado de identificación automática y captura de datos. Razones no les faltan: esta clase de soluciones contribuyen a la eficiencia y a reducir operacionales, lo que permite que el sector maneje correctamente el creciente número de productos y materiales que fluyen a través de toda la cadena de suministro.