El cuerpo de investigaciones que sustenta los beneficios de la completa dieta mediterránea es cada vez más rico y diverso: a las evidencias de que esta modalidad previene la depresión y mejora el estado de ánimo, contribuye a la quema de grasas y al control de peso, aumenta la esperanza de vida y previene enfermedades cardíacas, varios tipos de cáncer o diabetes tipo 2, se suma un nuevo estudio sobre su influencia en la prevención del deterioro cognitivo.
El nuevo estudio, publicado en la revista Alzheimer’s & Dementia: The Journal of the Alzheimer’s Association el pasado 7 de enero de 2021, alerta de que comer alimentos azucarados, fritos y procesados podría anular los beneficios de la dieta mediterránea. La investigación analizó de alimentos con peso en la dieta occidental de adultos mayores, como fritos, dulces, carnes rojas y procesadas, así como lácteos enteros.
Seguir una estricta dieta mediterránea de verduras, frutas, cereales integrales, pescado, aceite de oliva, nueces, semillas y legumbres -a la vez que se limitan alimentos de esta índole- equivale a que el cerebro sea 5,8 años más joven, encontraron los científicos.
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Los 5.001 participantes de la investigación siguieron la dieta mediterránea durante casi 20 años. Cada tres, llenaban un formulario detallando la frecuencia con la que comían 144 alimentos.
Los científicos encontraron que “los participantes con un deterioro cognitivo más lento durante los años de seguimiento fueron los que se adhirieron más a la dieta mediterránea, junto con la limitación de los alimentos que son parte de la dieta occidental, mientras que los participantes que comieron más de la dieta occidental no tuvieron ningún efecto beneficioso de los componentes de los alimentos saludables para frenar el deterioro cognitivo”.
Otras dietas similares como la DASH arrojan resultados similares, poniendo de manifiesto el vínculo fundamental entre la dieta y la salud cognitiva, así como la prevención de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
“Otros estudios muestran que la carne roja y procesada, los alimentos fritos y la ingesta baja de cereales integrales se asocian con una mayor inflamación y un deterioro cognitivo más rápido en las edades avanzadas”, dice Agarwal, según ScienceDaily. El científico recomienda aumentar la ingesta de vegetales, verduras de hoja verde, bayas, aceite de oliva y pescado si queremos frenar el envejecimiento de nuestro cerebro.
Fuente | Eat This, Not That