La figura del freelance no para de ganar enteros en el mundo actual al calor de la transformación digital y la transición hacia un nuevo paradigma laboral sustentado en la flexibilidad, el auge del trabajo remoto, las herramientas colaborativas o la movilidad. Entre los freelance proliferan diversos espacios de trabajo: algunos optan por habilitar una estancia y trabajar desde casa, otros se inclinan por las oficinas compartidas y otros abogan por los espacios de coworking.
4 factores determinantes para escoger tu espacio de coworking
El mundo de los seguros debe adaptarse y enfrentarse a un nuevo perfil habitual muy claro y con sus propios problemas y particularidades: los knowmadas digitales sufren problemas físicos derivados del sedentarismo y de pasar muchas horas enfrente del ordenador: entre ellos cabe destacar las lesiones musculares, el síndrome del túnel carpiano, los problemas de espalda, la fatiga visual, la depresión, el estrés crónico o la ansiedad.
Ojos secos, problemas de sueño, jaquecas, nomofobia y patologías cardiovasculares, endocrinas u obesidad derivada de la falta de movimiento son algunas de las consecuencias de los nuevos trabajos digitales, tan estrechamente vinculados a ordenadores y smartphones.
Seguro de vida no necesariamente asociado a una hipoteca
Por ello, muchos jóvenes buscan nuevos seguros de vida, pese a que la tendencia apunta al retraso en su contratación con respecto a generaciones anteriores como los baby boomers, más atados al trabajo por cuenta ajena.
Por ejemplo, nacen aseguradoras alternativas como Divina Pastora que no están ligadas a compromisos bancarios como la contratación de una hipoteca. De este modo, freelances y coworkers pueden acceder a protección básica para enfermedad o accidente, así como opciones más completas para invalidez total. Según tus circunstancias, puedes calcular los seguros de vida disponibles para freelances y autónomos a través del siguiente comparador.
Fuente | Economía Digital